Hornacinas con imágenes religiosas
Introducción
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Es cierto que podemos considerar estas imágenes como patrimonio arquitectónico y escultórico menor, no obstante, durante siglos han formado parte de la vida de la población y por ello merecen nuestra consideración.
La historia de las imágenes religiosas va ligada a los acontecimientos históricos que les tocó vivir, a la religión católica y por último, al urbanismo, sobre todo en Maó y Ciutadella, condicionadas estas últimas, por haber sido ciudades amuralladas en su momento.
También las ideologías políticas, como veremos más adelante, han influido en los avatares sufridos por algunas hornacinas ya que fueron objeto de los enfrentamientos entre diferentes facciones.
Todo ello derivó en un continuo “quita y pon” de las imágenes, según las circunstancias de cada momento. Algo parecido al constante vaivén sufrido por el nombre de nuestras calles.
Para la elaboración del presente trabajo se ha recurrido a la poca bibliografía disponible, a la legislación urbanística y a la prensa de la época, en su mayoría católica y conservadora.
Las hornacinas, “capelles” o “capelletes”
La hornacina consiste en un hueco en la pared que puede adoptar diferentes formas: rectangular, cuadrada, oval, etc., en el cual se coloca una estatua, una imagen o una lámina. En algunas ocasiones, junto a la imagen se pone algún adorno, generalmente jarrones con flores.
Suelen estar protegidas del exterior por una puerta con un marco de madera y cristal o, más recientemente, metacrilato y algunas tienen una pequeña cerradura. También las hay que están abiertas al exterior. Y hoy en día algunas disponen, incluso, de luz artificial para su iluminación nocturna.
Reflejan la veneración por la figura representada, al tiempo que se implora su protección en cuanto a enfermedades infecciosas, epidemias plagas, invasiones y todo tipo de peligros que pudiesen acontecer.
Podemos encontrar hornacinas en muchas poblaciones españolas como Palma de Mallorca, Girona, Barcelona, Jaén, Pamplona, etc. y también en otros países del ámbito católico como Malta o Italia, entre otros.
No podemos olvidar el contexto religioso que da vida a estos elementos, concretamente la religión católica que desde sus inicios ha impregnado todos los ámbitos de la civilización occidental, influyendo en el pensamiento, las artes, e incluso, en la vida cotidiana de la población. Así pues, la expresión del fervor religioso se ha manifestado en las costumbres, fiestas y tradiciones populares.
Si bien la máxima expresión de esa religiosidad se produjo en los templos con la celebración de misas y otros actos impregnados de gran solemnidad (novenas, triduos, rosarios etc.), también se manifestó en las calles con la celebración de procesiones y fiestas en honor de un determinado patrón, en las cuales participaba el vecindario.
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| Hornacina iluminada de Sant Bartomeu. Ciutadella |
Muy bien lo refleja Joan Benejam en su obra “Ciutadella Veya” al referirse al periodo comprendido entre 1800 y 1850, dice así:
“… Tots es carrés es vespres estavan á las foscas, perque s’alumbrat public encara havía de naixer, y tant sols se veya algún que altra llumaneret dins una capelleta que per devoció s'encenia amb obsequi d’algun sant, com encara es sol veura en tal ó qual fatxada, per cas molt raru…”
También se comenta en la publicación “Llum Nova” de Es Migjorn Gran en 1913: "Costums del antigor. Molts anys enrera, cuant encara a Menorca no's coneixia el petroli o al menos no estava tan estés el seu us, els nostros antepassats per il-luminar els punts foscos, se valien dins les cases del oli que cremaven els benestants en llumeneres de varis blens mes o manco artistiques, llumetes (que ja no ho eren gaire i lums en crues que encara no eran manco i eren els mes usats per la pobrea. Es senyors, ademés de llumaneres solien servirse de cornicopias i salomons, per dar claror a ses sales i departaments de lucso. Per illuminar les tenebres del carré, ordinariament se recorria en els pobles grans a fanalets i grisols encesos devant les capelletes que en honor a varis sants hi havia a diferents carrés ... Bernat de sa plassa". (1)
En cuanto a las figuras más representadas nos encontramos con la imagen de la Virgen María y con determinados santos escogidos en función de la devoción que por ellos se sentía con la esperanza de su intercesión frente a la adversidad.
Por lo general, la figura del santo que las ocupa suele coincidir con el nombre de la calle en que está situada.
Por último está el tema de las hornacinas vacías. Es algo que en Menorca solo ocurre en Ciutadella, pero también sucede en muchas otras ciudades. Sin el contenido para el que habían sido creadas, las hornacinas han perdido su función y terminan utilizándose para otros cometidos.
Localización en el mapa
A continuación se muestra un mapa de Menorca, confeccionado mediante la herramienta de ubicación de Google Maps, con las localizaciones de todas las hornacinas, acompañadas de su correspondiente foto desplegable.
Las labores de localización y fotografía las ha llevado a cabo, en persona, la autora de este blog, recorriendo calle por calle cada una de las poblaciones de la isla.
A la vista del mapa se observa claramente una mayor presencia de hornacinas en Ciutadella en comparación al resto de poblaciones.
Ciutadella de Menorca
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| Ver mapa en Google Maps |
Estas murallas fueron parcialmente destruidas en 1558 con el asalto turco a la ciudad y se reconstruyeron en el siglo XVII. Entre los siglos XVII y XVIII se produjo una importante actividad constructiva que dio origen a nuevas iglesias, palacios y casas nobles.
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| Casco antiguo de Ciutadella delimitado por la actual avda. Contramurada |
En el año 1868 empezó el derribo de la muralla de tal forma que, hoy en día, el casco antiguo queda delimitado por la llamada Contramurada.
Por otra parte, no olvidemos que Ciutadella perdió la capitalidad de Menorca a principios del siglo XVIII, configurándose, a partir de ese momento, como capital únicamente eclesiástica y sede de la nobleza.
Como ya hemos comentado, a lo largo del siglo XIX los conflictos derivados de los enfrentamientos entre absolutistas y liberales se manifestaban, entre otras cosas, en ataques a las imágenes religiosas. También en la I y II República y la Guerra Civil las imágenes religiosas sufrieron sus vaivenes.
Ya en los años sesenta se tomó conciencia de la importancia del casco histórico, por lo que se iniciaron toda una serie de trámites encaminados a su protección, que se prolongaron por espació de unos 30 años.
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| Ayuntamiento y antigua muralla de Ciutadella |
En 1985, obtuvo la clasificación de Bien de Interés Cultural mediante la Ley 16/1985, de 25 de junio del Patrimonio Histórico Español, reafirmada en 1998, por Ley autonómica de patrimonio histórico, quedando clasificado como conjunto histórico.
Por último se elaboró en 1999 el “Plan Especial de Protección del conjunto histórico artístico de Ciutadella de Menorca” del Consell Insular de Menorca, con una clara vocación de protección del mismo.
Un primer paso para conocer algo más sobre las hornacinas, “capelles o capelletes” de Ciutadella ha sido recurrir al mencionado Plan Especial que precisamente trata de las condiciones de conservación y adecuación de los elementos simbólicos y ornamentales y establece que “... se conservarán y valorarán las hornacinas o altarcillos con imágenes religiosas de carácter popular y que poseen gran interés para la evocación de las formas de vida de la antigua Ciudadela, y el papel de las advocaciones religiosas, y que contribuyen significativamente a la escena urbana tradicional. Entre estas hornacinas figuran, por ejemplo las de San Miguel, San Rafael y San Sebastián, en las calles de los mismos nombres. Cualquier actuación en los edificios que posean estas hornacinas deberán salvaguardar ese elemento …” (2).
La única publicación específica sobre las hornacinas (capelles o capelletes) de Ciutadella que se ha podido localizar se encuentra en la Revista Quaderns de Cultura de 2016 y lleva el título “Capelletes, Cors de Crist i Sant Joan” y especifica: “A Ciutadella hi ha 21 capelletes repartides per diferents zones del casc antic… Durant la Guerra Civil en van destruir unes quantes. Per aquest motiu algunes ja no hi són i altres han sigut substituïdes per làmines”. Y continua “Una de les tradicions de la festa és que cada vegada que els caixers passen per davant d’una d’aquestes capelletes han de llevar-se el capell en senyal de respecte i de salutació al sant…”.
Se han localizado 22 hornacinas de las cuales, solo 1 corresponde a la Virgen María, 2 están vacías y las 19 restantes contienen santas y santos.
Al parecer existían 3 hornacinas más que no se han podido localizar, pero de las que sí ha quedado constancia.
- Una estuvo situada en la calle de Sant Cristòfol, documentada en el trabajo “Capelletes, Cors de Crist i Sant Joan”.
- La otra en la calle de Sant Miquel, nombrada en el “Plan Especial de Protección del conjunto histórico artístico de Ciutadella de Menorca”.
- Y la última estuvo ubicada en la calle de Sant Eloi, contenida en un nicho desde tiempos remotos. La publicación “El Vigía católico de Ciudadela” de abril de 1895 informaba del robo de la imagen del santo y de su hallazgo al día siguiente. Al respecto comenta “... sabemos que se están practicando por quién corresponde las debidas pesquisas, para castigar cual se merece el autor de dicha hazaña, en el caso de ser descubierto. se necesita en verdad, mucha despreocupación, gran falta de patriotismo y un sello muy marcado de incredulidad, para hacer mofa de imágenes que representan algún Santo y con la circunstancia agravante de despreciar y ridiculizar además las tradiciones de nuestros cristianos antepasados, de las cuales tradicimos son evidentes testimonios esas imágenes que se ven en algunas calles de esta ciudad”.
A continuación se relacionan las 22 hornacinas, incluyendo las 2 vacías. Es probable que existieran, aparte de las tres mencionadas más arriba, otras que fueron desapareciendo con el transcurso del tiempo, como pasó durante la Guerra Civil.
Mare de Déu
Virgen de la Inmaculada. Ciutadella
Carrer de la Purísima, 29
Hornacina con marco de madera y cristal, con una pequeña cerradura. En su interior, la imagen de la Inmaculada Concepción, o Purísima Concepción, lleva una corona de doce estrellas, símbolo de mérito, armonía y solidaridad. Va vestida con túnica blanca y manto azul, atributos de pureza y eternidad respectivamente. A su lado se encuentra un jarrón con flores.
A sus pies se distingue vagamente una media luna hacia abajo y una serpiente, simbolizando su dominio sobre el pecado.
La calle de la Purísima está muy cerca de la iglesia de San Francisco, donde antiguamente estuvo el convento de los franciscanos. Esta orden proclamaba el misterio de la Virgen, incluso antes de que fuese establecido como dogma por el papa Pio IX.
Fernando Martí Camps, en su obra “Estudio de la antigua religiosidad menorquina”, comenta que en la isla había una gran devoción hacia esta Virgen y algunas iglesias le tenían un altar dedicado. En Ciutadella, se tiene documentado su culto desde 1607.
En agosto de 1935 los vecinos de la calle Purísima acordaron abrir, sobre la fachada de una de sus casas más céntricas, un nicho en forma de capillita para colocar la imagen de la Virgen, que antes estaba en la parte de la muralla que cerraba dicha calle (3).
Es la patrona de Infantería desde 1892.
Sant Pere de d’Alcàntara
Sant Pere d'Alcàntara. Ciutadella
Carrer de Sant Pere d’Alcàntara, 14
Hornacina protegida con un cristal sujeto con tornillos a la pared. La imagen muy sencilla, lleva una aureola troquelada con formas geométricas que forman el dibujo de una estrella. Va vestido con hábito de franciscano y lleva un cayado en la mano izquierda.
Este santo, como su nombre indica, nació en Alcántara, Cáceres. Perteneció a la Orden de los Frailes Menores, rama más numerosa de la Primera Orden de San Francisco. Destacó por su labor reformadora, mística y asceta. Fue beatificado por Gregorio XV en 1622 y canonizado por Clemente IX en 1669.
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| Sant Pere d'Alcàntara. Ciutadella |
Hornacina sin protección del exterior. La imagen del monje es muy tosca, lleva el hábito franciscano y está colocada sobre una peana.
La calle de Sant Pere d’Alcàntara está también muy cerca de la iglesia de San Francisco, donde antiguamente estuvo el convento de los franciscanos, como ya se ha comentado.
Sant Rafel
Sant Rafel. Ciutadella
Carrer de Sant Rafel, 4
Hornacina con marco de madera cerrado con cristal y pestillo.
Acompaña al arcángel un niño sobre el que posa su mano, probablemente se trata de Tobías. En el Antiguo Testamento se dice que el arcángel Rafael acompañó a Tobías en su viaje a Gabael. Va vestido con túnica blanca y manto azul y a su espalda se pueden apreciar las dos alas. El niño lleva una túnica blanca. Ambas figuras reposan sobre un pedestal.
En octubre de 1892, con motivo de la festividad de San Rafael, varias costureras y vecinos improvisaron en la calle del mismo nombre una fiesta callejera. Se adornaron las fachadas de las casas con banderolas y farolillos de colores, se hizo una gran fogata y se iluminó profusamente la capillita.
En agosto de 1933, durante la II República, “El Bien Público” comenta el robo de la imagen: “Un nuevo robo sacrílego se ha perpetrado: el de la imágen de San Rafael que se hallaba en la calle de dicho nombre. ¡Respetemos las ideas!...”.
El Arcángel Rafael es patrono de los médicos, farmacéuticos y protector de los invidentes, contra enfermedades, etc.
San Cristòfol
Sant Cristòfol. Ciutadella
Carrer de Sant Cristòfol, 7
Hornacina con marco de madera y cerrada con cristal para protegerla del exterior. Tiene una pequeña cerradura.
El Santo está adornado con una corona rematada toda ella con formas geométricas muy parecidas a la flor de lis. Si bien por lo general dicha flor suele ser el símbolo de la Virgen o de San José, también puede simbolizar pureza de alma y de cuerpo.
San Cristóbal lleva al niño Jesús sobre el hombro y reposa sobre una peana. Al niño le falta el brazo derecho.
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| Sant Cristòfol. Ciutadella |
Esta hornacina está expuesta al aire libre, enmarcada en piedra, está adornada con una concha en la parte superior y todo el conjunto está protegido con un pequeño tejado.
El santo, de pequeño tamaño, aparece representado con un cayado en la mano derecha, las piernas hundidas en el agua y el niño Jesús sobre su hombro izquierdo, dispuestos para cruzar el río, tal y como explica la leyenda.
San Cristóbal es el patrón de los caminantes y de los viajeros.
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| Sant Cristòfol. Ciutadella |
Hornacina sin protección del exterior. Se trata de un bajorrelieve con la imagen de San Cristóbal que lleva al niño Jesús sobre sus hombros, a la vez que sujeta un cayado. Parece que tenga también las piernas hundidas en el agua, si bien, se distingue muy poco.
Según Fernando Martí Camps, en su obra “Estudio de la antigua religiosidad menorquina”, en Ciutadella Sant Cristòfol tenía su propia Cofradía, al menos, desde 1607.
A finales del siglo XIX el Archiduque Luis Salvador en su obra “La isla de Menorca en texto e imágenes”, al describir las calles de Ciutadella comenta: “... llegamos a la calle de S. Cristóbal, origen a su vez de varios ramales. La capillita roja del santo se nos muestra a la derecha en una especie de hornacina...”. Por desgracia, solo con estos datos no podemos discernir a qué hornacina se refiere ya que hoy en día, ninguna está pintada de rojo.
En junio de 1909 “El Noticiero Popular” informaba de que se había adquirido una nueva y hermosa imagen de Sant Cristòfol para ser colocada en una de las hornacinas que hay en la calle del referido Santo y comenta que la imagen, de cartón madera, medía dos palmos y medio de altura. Una vez bendecida, fue colocada en la hornacina. La regaló la señora Margarita Trémol de Pons con la finalidad de sustituirla por una que estaba muy vieja y deteriorada.
“El Bien Público” de 10 de julio de 1924 lamentaba que la antigua costumbre de celebrar la festividad de Sant Cristòfol con reuniones familiares en los jardines o patios de las casas, en las que no podían faltar los “caragolins”, había desaparecido y que la mayor parte de la gente prefería celebrarlo en “fonducos” o en vegas en el campo.
No obstante, en 1931, sí se celebró la fiesta con meriendas familiares o de amigos a orillas del puerto o en playas vecinas, al atardecer y por la noche se dispararon cohetes. En la calle de Sant Cristòfol se celebró también la fiesta, con adornos e iluminación en las tres hornacinas (4).
Los datos recopilados por la Asociación de Vecinos Ciutadella Vella, vienen a confirmar lo anterior, ya que indican que entre los siglos XVIII y XX la fiesta se celebraba el día 9 de julio en la calle y con fuegos artificiales. Se interrumpió en 1953 por un accidente mortal y se recuperó en 2007.
En el año 2006 esta misma asociación consiguió parar un proyecto urbanístico que conllevaba el derrumbe de 5 casas de esta calle para convertirlas en apartamentos. En 2008 el Ayuntamiento denegó la licencia por ir contra el Plan Especial del núcleo antiguo. Con estas actuaciones se pudo conservar la esencia de la calle (5).
Sant Bartomeu
Sant Bartomeu. Ciutadella
Carrer de Sant Bartomeu, 5
Hornacina protegida con cristal y marco de madera con una moldura. Puede iluminarse mediante una luz interior.
La imagen, situada sobre una peana, lleva una sencilla aureola, a modo de círculo dorado y va vestida con ropajes verdes y marrones. En la mano derecha lleva un libro y en la izquierda un crucifijo.
Es el patrón de los curtidores y trabajadores de la piel en general.
Sant Jaume
Sant Jaume. Ciutadella
Carrer de Sant Jaume, 3
Hornacina con marco de madera y cerrada con cristal para protegerla del exterior. Se aprecia lo que podría ser una pequeña cerradura.
La imagen, porta una corona mas elaborada que forma un círculo amplio con el fondo troquelado con formas artísticas. Lleva un hábito azul claro, un manto marrón y un bordón de peregrino en la mano derecha, con lo que parece una calabaza en el extremo a modo de botijo. En la mano izquierda lleva un libro.
Santa Clara
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| Santa Clara. Ciutadella |
Hornacina rectangular apaisada, protegida con un cristal que no parece pueda abrirse con facilidad.
La imagen lleva un sayal marrón y un velo negro, hábito propio de las clarisas y sobre su cabeza porta una sencilla aureola en forma de circunferencia. Porta un báculo en la mano. Está flanqueada con un jarrón de flores a cada lado.
Patrona de los orfebres y del buen tiempo (viene de la Edad Media la tradición de que las novias ofrezcan huevos a Santa Clara, para que no llueva el día de su boda).
Hoy en día es la patrona de la televisión y las telecomunicaciones.
Sant Pere
Sant Pere. Ciutadella
Carrer de Sant Pere, 4
La hornacina tiene un marco de madera con cristal y una pequeña cerradura.
La imagen, vestida con hábito y manto, está situada sobre una peana, lleva unas llaves en la mano derecha, un libro en la izquierda y sobre su cabeza una aureola sencilla en forma de circulo. A ambos lados tiene unos jarrones alargados con flores.
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| Sant Pere. Ciutadella |
Hornacina con marco de madera con cristal y cerradura.
La imagen, con ropajes blancos y azulados, lleva las llaves en la mano derecha y un libro abierto en la izquierda y, sobre la cabeza una sencilla aureola. Está situada sobre una peana.
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| Sant Pere. Ciutadella |
En este caso la hornacina sobresale de la pared y está protegida del exterior por una lámina de metacrilato atornillada. La imagen aparece sentada en un trono sobre un pequeño pedestal. Lleva el ropaje de obispo y una llave en la mano izquierda.
Sant Pere es patrón de los pescadores, los constructores de barcos y los fabricantes de redes.
Por una entrevista de Laura Bañón en Menorca Info, sabemos que en 2010 la propietaria de esta capìlla era Elena Mondo Vivó, quien llegó a la vivienda de la calle Sant Pere, 12, en el año 1943 y desde esa fecha ha venido cuidando la imagen. Explica que para encalar la fachada la ayudaban a bajar el santo, que pesaba mucho y explicaba: “... i jo mateixa li feia un repàs de pintura. Li feia la retxeta dels ulls, els colorets de la vestimenta i de la mitra i li pintava la barba blanca. El deixava com un senyoret!...”. (6)
A principios de enero de 1872, tanto “La Crónica de Menorca” como “El Constitucional” se hicieron eco del robo de la imagen de San Pedro, que se encontraba colocada en la fachada de una casa. Muy probablemente este acto fue consecuencia de los enfrentamientos entre conservadores y liberales. Ambas publicaciones tratan el suceso como algo escandaloso, producto del “reinado del terror liberal”. (7)
Lo que no nos dicen las noticias es a cuál de las tres figuras que tenemos recogidas se refiere.
El día de San Pedro se hacía una fiesta y en la víspera una hoguera.
Santa Rosalia
Santa Rosalia. Ciutadella
Carrer de Santa Rosalia, 26
La hornacina está protegida del exterior con un marco con cristal y tiene un pestillo que permite abrirla.
La Imagen, está coronada de rosas y lleva una aureola gruesa sobre su cabeza, un báculo de abadesa en la mano izquierda y una calavera a los pies. Su vestido pudiera ser dorado y la capa azul, ambos con adornos. Flanquean la imagen rosas blancas en jarrones azules.
Santa Rosalía fue abadesa y luego ermitaña. Antiguamente existió un oratorio con el mismo nombre en las afueras de Ciutadella.
Se tenía mucha fe en sus intercesiones, por lo que en 1652 se buscó su ayuda contra la epidemia de peste que devastó Ciutadella.
En 1917 se volvió a solicitar su influencia ante la cantidad de muertes provocadas por la gripe que asoló la isla entre 1917 y 1918. Por ello, todavía en octubre de 1918, en la catedral de Ciutadella, se rezó el Santo Rosario y se hizo una solemne rogativa al Altísimo para obtener el fin de la epidemia gripal que afligía a la ciudad.
A raíz de estos últimos acontecimientos, el 19 de enero de 1919, se celebró en la iglesia de San Agustín una fiesta con Misa y Tedeum en honor de Santa Rosalía, costeada por los vecinos de la calle Obispo Vila, los cuales habían invocado su ayuda cuando la enfermedad de la gripe se hallaba en su período más álgido y no haberse producido ninguna defunción en esa calle durante la enfermedad. (8)
Beat Ramon Lull
Beat Ramon Llull. Ciutadella
Carrer del Beat Ramon Llull, 5
Hornacina sin protección del exterior. La imagen, porta un sencillo círculo a modo de aureola, y lleva hábito franciscano y un rosario colgando de la cintura. En la mano izquierda un libro. Le falta la mano derecha.
Si bien, Ramón Llull no ha sido beatificado, en Mallorca se le conoce como beato. Su beatificación se inició en el siglo XVI y hoy en día la iglesia católica lo denomina siervo de Dios. Fue, entre otras ocupaciones, escritor, filósofo, teólogo y clérigo. Perteneció a la Tercera Orden de San Francisco.
Sant Joan Baptiste
Sant Joan Baptiste. Ciutadella
Carrer de Sant Joan Baptiste, 8
Un cristal protege una lámina con la imagen de San Juan niño, con un cordero entre los brazos, y el nombre del santo en la parte inferior.
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| Sant Joan Baptiste. Ciutadella |
Lámina de San Juan niño llevando un cordero entre los brazos. Está colocada en el fondo de la hornacina, protegida con un marco de aluminio y cristal. Lleva dibujada una bandera de Sant Joan en la parte superior. A ambos lados de la figura hay unos claveles y unas cañas.
En la parte inferior del marco, dibujado a base de perforaciones, encontramos el nombre “ST. JOAN” entre dos cruces.
El origen de la fiesta en honor de Sant Joan se remonta al siglo XIV y tiene una mezcla de elementos eclesiásticos y civiles de la época. Se celebra en Ciutadella los días 23 y 24 de junio.
Sant Josep
Sant Josep. Ciutadella
Carrer de Sant Joan Bosco con carrer de s’Arc, 31
Imagen de San José y el niño protegida por un cristal y marco de madera con cerradura.
Fernando Martí Camps indica que San José tenía su propia Cofradía al menos desde 1607.
Sabemos por “El Bien Público” que la figura podría datar de 1870 y que se colocó como agradecimiento por librar a los vecinos de la epidemia del cólera.
En verano de 1932, durante la II República, robaron la imagen de su hornacina, que por aquel entonces estaba abierta. (9)
Sant Sebastià
Sant Sebastià. Ciutadella
Carrer de Sant Sebastià, 16
Hornacina protegida con marco de madera y cristal. San Sebastián lleva una aureola gruesa y dorada sobre su cabeza y está atado a un árbol con el torso desnudo. Muestra el pecho, brazos y una pierna atravesados por flechas.
Se le tenía ya gran devoción desde muy antiguo, al menos desde el siglo XVI. Se sabe que en el siglo XVII se le invocó y con su intercesión los ciudadelanos se consideraron liberados de la peste. Tal era la fe que por él se sentía que, en 1654, se solicitó celebrar su festividad.
La devoción y la creencia en los poderes de los santos, cuando había pocos remedios al alcance de los humanos, era importante, de hecho, Lola Carbonell Beviá, en su obra “Religión y repoblación en Menorca: Plena y Baja Edad Media”, comenta que en esa época a San Sebastián se le rogó para que desviara las flechas de la peste.
En 1865 el cólera llegó a Ciutadella y se atribuyó a la protección del santo que muriera solamente un vecino de esa calle.
A raíz de los alborotos producidos como consecuencia de la revolución del año 1868, fueron echadas al mar, desde el Mirador que da al puerto, muchas imágenes de las calles de Ciutadella, entre ellas la de San Sebastián. Al respecto dice "El Iris" de 31 de enero de 1928: “... habiéndose encontrado despues de la bárbara hazaña, dicha imagen e incorrupta, ilesa y con las flechas clavadas en su cuerpo, como es representada su figura. La imagen se llevó a la Catedral”.
A principios de enero de 1872 robaron la imagen que estaba colocada en la fachada de una casa. La noticia dice así: "En Ciudadela fueron robadas una de las pasadas noches, dos pequeñas imágenes de San Pedro y San Sebastian que estaban colocadas en los frontis de dos casas de aquella ciudad, y que recordaban la piedad y fervor religiosos de nuestros antepasados. Lo que sucede en Ciudadela raya el escándalo y no parece sino que ha empezado ya el reinado del terror liberal. A la autoridad incumbe averiguar, quienes son los factores del robo é imponerles el castigo consiguiente al mencionado crímen, llevado á cabo en perjuicio del buen nombre y honradez á toda prueba de la mayoría ciudadelanos”. (10)
En el diario "El Iris" de enero de 1928 se comenta que esta hornacina tenía luz todas las noches, costeada por los marqueses de Menas Albas y, con anterioridad, por la familia Squella.
En los años treinta del siglo XX, el día 20 de enero, festividad de San Sebastián, patrón menor de Ciutadella, se celebraba una misa solemne en la Catedral, a la que asistía el Ayuntamiento. A continuación, se hacía una procesión con la imagen del santo y se iluminaba y adornaba la hornacina.
Según "El Iris" de 2 de julio de 1932 las hornacinas seguían sufriendo ataques: “Nos dicen también que días pasados desapareció la luz que ardia ante la imagen de San Sebastián. Es de esperar que el Sr. Alcalde tomara cartas en el asunto encaminados a dar con los autores de semejantes desafuero y para evitar su repetición”.
En una noche de julio de 1933, robaron nuevamente de su hornacina la imagen de San Sebastián. La noticia la daba “El Bien Público” y añadía: “… Es una de tantas manifestaciones de la incultura de unas hordas salvajes que invaden los pueblos y que no tienen siquiera el valor de obrar a la luz del día”.
San Sebastián es patrón de soldados y atletas y se le conocía como “abogado contra la peste”.
Sant Onofre
Sant Onofre. Ciutadella
Carrer de Sant Onofre, 4
Hornacina con cristal, marco de madera y cerradura.
La imagen de San Onofre, también con aureola dorada y gruesa sobre su cabeza, está colocada sobre una peana, lleva barba larga y poblada, un libro abierto en la mano derecha y un cayado en la otra. Parece muy reciente.
La hornacina, a diferencia de otros tiempos en que se solían utilizar candiles, ahora tiene una luz led interior que la rodea.
Antiguamente existió una pequeña iglesia dedicada a este santo eremita en Ciutadella.
Es protector de los tejedores.
Hornacinas vacías
Las hornacinas vacías de Ciutadella siguen a la espera del santo que les corresponda y si bien han perdido su funcionalidad, al menos de momento, se conservan como elementos tradicionales y como patrimonio del pasado.
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| Hornacina vacía. Ciutadella |
No se disponen de datos sobre la imagen que pudo contener.
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| Hornacina vacía. Ciutadella |
Esta hornacina tiene un aspecto más oriental, dispone de una repisa para colocar la imagen y está coronada con una cruz. No se han conseguido noticias de la imagen que pudiera contener.
Ferreries
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| Ver mapa en Google Maps |
Mare de Déu
Mare de Déu. Ferreries
Carrer des Forn, 6
No llega a ser una hornacina al uso, ya que la imagen no se encuentra en un hueco de la pared sino que está adherida a ella y amparada por un pequeño alero que protege a la Virgen y el Niño. Su estado de conservación no es bueno. Los colores del ropaje son difíciles de apreciar, si bien parece que la Virgen lleve un manto azul que le cobre la cabeza.
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| Mare de Déu. Ferreries |
La imagen de la Virgen, de color blanco, tiene las manos cruzadas sobre el pecho y en su cabeza lleva una sencilla aureola. Está en una hornacina flanqueada por dos columnas y protegida por un marco de madera acristalado y cerrado con un pequeño pestillo. En la parte superior aparece escrito: “Año Mariano 1954”.
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| Mare de Déu. Ferreries |
Esta hornacina sigue el mismo modelo constructivo que la anterior. En esta ocasión la Virgen también tiene las manos cruzadas sobre el pecho. Va vestida con túnica blanca y manto azul, símbolos de pureza y eternidad respectivamente, como ya hemos comentado. Sobre su cabeza lleva también una aureola, rematada en la parte superior con un rombo, que se interpreta como un símbolo de conexión entre el cielo y la tierra, entre lo divino y lo humano. En la parte superior aparece escrito en relieve: “1954 Año Mariano” y, en la parte inferior, “Escuelas Nacionales”. La imagen está protegida con un cristal.
El edificio de las Escuelas Nacionales (“Antigues escoles”), construido entre 1932 y 1933, fue el primer centro escolar público de la población y, hoy en día, se ha convertido en la Residencia de Jubilados y Pensionistas de Ferreries.
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| Mare de Déu. Ferreries |
Esta hornacina está situada justo a la entrada de la carretera des Migjorn y sigue el mismo modelo que las anteriores. La imagen está protegida por un marco de madera acristalado y cerrado con una cerradura. La Virgen, que lleva una aureola, aparece en la misma actitud y vestimenta que en los otros casos ya comentados. En la parte superior de la hornacina aparece escrito en relieve: “1954 Año Mariano” y en el fondo, detras de la imagen vemos escrito en pintura "AVE MARIA PURISSIMA".
En la fachada de la casa en la que está situada aparece una placa con la inscripción "Ses Delicies", nombre de la casa que podría derivar de la denominación del paraje en que se encuentra.
Estas tres últimas hornacinas, por los años a que hacen referencia, corresponden al Año Mariano convocado por el Papa Pío XII entre 1953 y 1954, mediante la encíclica Fulgens Corona, para celebrar el centenario de la instauración del Dogma de la Inmaculada Concepción por el Papa Pío IX. Para propagar dicho dogma se recurrió a sermones, conferencias, peregrinaciones en honor de la Virgen a lugares de especial devoción, así como a rendirle culto en altares y capillas.
Desde muy antiguo, existía una gran devoción por la Purísima. A finales del siglo XIX, la celebración de la festividad de la Purísima Concepción suponía un gran acontecimiento y en 1888 se celebraron varios actos solemnes en su honor, con misa y procesión, que fueron muy concurridos. La misma participación se produjo en cultos llevados a cabo en Es Mercadal y San Cristóbal. Entonces existía una archicofradía de Las Hijas de María que tenían un estandarte propio.
Sant Pancraç
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| Sant Pancraci. Ferreries |
Hornacina muy sencilla ahondada en la fachada de la misma casa. Esta cerrada con un cristal que la protege del exterior. La imagen de San Pancraç, mártir, lleva un libro abierto en la mano izquierda y con la derecha está señalando en una dirección con el dedo. Lleva una modesta aureola sobre su cabeza y viste una túnica marrón y vestido verde y ocre. Llaman la atención sus sandalias en forma de bota.
Su imagen esta relacionada con el trabajo y la salud.
Es Migjorn Gran
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Mare de Déu
Mare de Déu. Es Migjorn Gran
Carrer Major 4
Hornacina con marco de madera y cristal. La imagen, que parece una pintura, corresponde a la Inmaculada. En este caso viste con manto gris azulado y el hábito es de color amarillento. Sus manos están cruzadas sobre el pecho.
Necesita restaurar.
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| Mare de Déu. Es Migjorn Gran |
Hornacina cerrada con madera y cristal. La imagen de la Virgen lleva la Medalla Milagrosa en el brazo derecho y al niño en el izquierdo.
La Medalla Milagrosa constituye un símbolo para aquellos que buscan protección divina y materna.
Sant Cristòfol
Sant Cristòfol. Es Migjorn Gran
Es Pla de l'Església
Si bien esta hornacina forma parte de la fachada de la iglesia se incluye en el presente trabajo ya que tiene las mismas características que todas las estudiadas.
Hornacina con marco de madera y cristal que la protege del exterior. San Cristóbal, colocado sobre una peana, lleva al niño Jesús sobre su hombro izquierdo y un cayado en la mano derecha. Luce una sencilla aureola.
Como hemos comentado solo se han hallado 3 hornacinas y tenemos constancia de que con anterioridad a 1913 no había ninguna en el pueblo, siempre y cuando demos por cierto lo publicado en el quincenario independiente “Llum Nova” de 29 de marzo de ese mismo año, ya mencionado anteriormente, que al hablar de la iluminación de las calles des Migjorn Gran comentaba: “...Per illuminar les tenebres del carré, ordinariament se recorria en els pobles grans a fanalets i grisols encesos devant les capelletes que en honor a varis sants hi havia a diferents carrés. A n’es Mitjorn poble pobre i no gaire antic creim que casi sempre correía per conta de sa lluna el dissipar sa fosca de la nit ja que no hi ha senyals d’haverhi hagut au-mon nitxos per colocar-hi sant ni tampoc ningún sab res. Pero per la festa de Sant Cristofol per il·luminiar la plasseta aont se fica el ball á n’el recó aon avui tenim la carniceria su vora l’Obra de l’esglesia hi havia un cavallet de roques i allá dalt posaven un soport o canalobre de ferro acabat dalt en forma de ferros de fogó i damunt hi encenien una gala o faster que un homo alimentava amb teies de pi i altres llenyes primes i burcantys… Bernat de sa plassa".
Por ser San Cristóbal patrón de los automovilistas, el día 10 de julio de 1910 se celebró, por primera vez, la bendición de coches, bajo la advocación del Santo, tal y como se hacía en algunas capitales de España y Francia. Se celebraba una misa y luego, en la plaza, se procedía a la bendición de las placas de metal plateado con la imagen del santo, que luego eran fijadas a cada uno de los coches. Finalmente se bendecían los coches y a sus conductores. La bendición de coches es algo que todavía se realiza hoy en día.
Alaior
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En Alaior podemos encontrar las siguientes hornacinas:
Sant Antoni
Sant Antoni. Alaior
Carrer de Santiago Pons Quintana, 16 (abans carrer Baixamar)
El antiguo “carrer de Baixamar” estaba dedicado a Sant Antoni y precisamente, a la altura del número 16, podemos ver una una orla de piedra, de forma ovalada, en cuyo centro está la imagen de dicho santo, sobre una pequeña peana, con unas vestiduras de monje y el niño Jesús en el brazo izquierdo.
En este caso no se trata propiamente de una hornacina, si bien se puede incluir ya que su apariencia y función viene a ser la misma.
Sant Nicolau
Sant Nicolau. Alaior
“Es Carreró” dedicat a Sant Nicolau, 55
La imagen, situada sobre una peana, está en una hornacina con marco de madera y cristal, cerrado con un pequeño candado. San Nicolau lleva un hábito de monje, atado con un cordón y un libro abierto en la mano izquierda. Puede distinguirse una instalación eléctrica para iluminar la imagen con cuatro portalámparas. En este caso el santo luce una aureola negra en forma de aro con un adorno interior.
Es Patrón de los marineros, pescadores y prostitutas, entre otros.
Santa Rita
Santa Rita. Alaior
Carrer Santa Rita, 2
Hornacina de piedra cubierta con un cristal. Santa Rita, monja agustina, viste el hábito negro, propio de esta orden, anudado con un cordón y una toca blanca. Sobre la cabeza luce una aureola. Lleva un crucifijo en la mano derecha y un libro en la izquierda. En la frente lleva la marca del estigma divino (marca de la corona de espinas de Cristo). A su lado se ha colocado un jarrón con margaritas. Santa Rita lleva una aureola bastante amplia y, superpuesta, lo que podría parecer una corona de espinas, símbolo de la Pasión de Jesús. Ello tendría su origen en que mientras la santa estaba rezando se encontró sobre la frente la herida de la corana de espinas de Jesús. Este estigma se mantuvo hasta que murió.
Es patrona de las causas imposibles, enfermedades y heridas de muerte.
Antiguamente se le tenía una gran devoción, juntamente con San Sebastián, San Alberto y San Roque, para la cura de la viruela. Por ello, a finales de 1881 se les dedicaban novenas para que intercediesen ante la epidemia que afligía la isla. (13)
Maó
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Las tres primeras están situadas en lo que fue el recinto de la ciudad medieval, dentro de sus murallas. En cuanto a Santa Eulalia, esta calle corresponde a un ensanche del siglo XIX, en lo que antiguamente era el “Camí vell des Castell.”
Mare de Déu
Mare de Déu. Maó
Carrer del Rosari, 31
Pequeña hornacina situada en la esquina de la calle del Rosario con Isabel II.
Se trata de un bajo relieve en piedra, con forma rectangular, de la Virgen del Rosario, que lleva en la mano izquierda al niño Jesús y en la derecha algo que podría identificarse como una rosa.
En este caso, el nombre otorgado a la Virgen hace referencia al rezo del Rosario, práctica muy común en el ámbito católico, tanto en los hogares, como en las iglesias.
Su culto viene de muy antiguo. Ya en el siglo XVIII era muy venerada, celebrándose procesiones en su honor.
Sabemos por “El Vigía de Ciudadela” que en el siglo XIX se consagraba el mes de octubre al Santísimo Rosario y que era una devoción celebrada en todas las iglesias .
Sant Antoni
Sant Antoni. Maó
Portal lateral de la iglesia de Santa María en Plaza Conquista
Se ha incluido esta imagen de San Antonio, situada en la fachada lateral de la iglesia de Santa María, como imagen religiosa de las calles de Mahón ya que las fuentes consultadas no acaban de ponerse de acuerdo en cuanto a su procedencia:
Por un lado, según el artículo de Juan Victori titulado "Desaparece la calle de la Conquista ", en la Revista de Menorca de diciembre de 1943, existía una hornacina, con la imagen de San Antonio, patrón de Menorca, que estaba en el arco del Pont des Castell, situado en la confluencia de la calle de este mismo nombre con la calle de La Conquista.
Más adelante, en septiembre de 1945, la misma Revista de Menorca informa de la inauguración de la plaza de la Conquista y del traslado de la imagen de San Antonio a la "Puerta de San Antonio" de la iglesia de Santa María, en la mencionada plaza, donde fue bendecida.
Por otro lado, según Mascaró Pasarrius, la imagen perteneció a la fachada de una casa de don José Riera Benac que fue general y director de la Academia de Artillería e impulsó la urbanización del predio de Santa Ana en Es Castell. (14)(15)
Por último, según el Pbro. Juan Gutiérrez Pons, al derrumbarse la cuesta de "s’esquinxe colsus" desapareció el arco y la hornacina que albergaba la imagen de San Antonio, si bien no dice que se hizo con ella. (16)
La imagen está colocada sobre una peana, va vestida con hábito y lleva un libro abierto en la mano.
En la Edad Media se recurría a San Antonio para que sanara a los enfermos de peste. Lola Carbonell Beviá, en su obra “Religión y repoblación en Menorca: Plena y Baja Edad Media”, señala tres “santos antipeste”: San Antonio, San Sebastián y San Roque.
Santa Eulàlia
Santa Eulàlia. Maó
Carrer Santa Eulàlia, 6
A esta hornacina le falta el cristal con el que, en algún momento, se protegió la imagen, como se deduce de los orificios para los tornillos que se pueden apreciar a los lados.
Santa Eulalia, virgen y mártir, está colocada sobre una peana. A la figura le faltan las manos y lleva una túnica rosada ajustada con un cinturón y un manto azul. Sus pies están cubiertos con unas sencillas sandalias. Lleva una especie de aureola en forma de rayos. Es obvio que necesita una restauración.
Debajo de la hornacina se ha colocado una placa con el siguiente texto: “LA DEDICACIÓ A SANTA EULÀLIA D’AQUEST CARRER ABANS EL CAMÍ VELL DES CASTELL DATA DE FINALS DEL SEGLE XVIII. EL NOM RECORDA N’EULÀLIA POLI I TALTAVULL PROPIETARIA EN AQUELL TEMPS DE LES TERRES DEL PRINCIPI DEL CAMÍ”
El día 12 de febrero se celebraba la festividad de Santa Eulalia y la imagen se engalanaba e iluminaba. Así lo detalla “El Menorquín” de febrero de 1868 que comenta: “El miércoles llamaba la atencion de los transeuntes la antiquísima imágen de Santa Eulalia, situada en la calle del mismo nombre, recien pintada y adornada con gusto, al propio tiempo que iluminada con motivo de ser su festividad …”.
También los vecinos de la calle de Santa Eulalia celebraron unas fiestas en julio de 1871, que fueron muy concurridas, alegres y bulliciosas, con música y adornos. Se celebraron durante las noches del sábado, domingo y lunes.
En época de la II República, concretamente el 16 de mayo de 1933 la imagen fue retirada de la hornacina, al respecto “El Bien Público” informaba: “Ayer, ignorarnos si cumpliendo el acuerdo municipal que publicamos en su día, o por disposición del propietario de la casa de la calle del Carmen número 22, en cuyo ángulo de unión con la de aquel nombre estaba colocada, pareciendo de su legítima pertenencia, ha sido quitada la imagen de Santa Eulalia cuya santa daba nombre a la citada vía, lamentamos y protestamos del odio sectario que se ceba en estas muestras de fe de los vecinos de la calle afectada”. Al día siguiente la misma publicación decía que la imagen era propiedad de Jorge Prieto. (17)
Sant Roc
Sant Roc. Maó
Carrer de Sant Roc, Pont de Sant Roc
El Portal de Sant Roc es el único portal de la muralla que hoy en día se conserva y, en su parte superior, podemos admirar la hornacina de dicho santo. La denominación de Portal de Sant Roc procede del siglo XVIII, si bien anteriormente había tenido diferentes nombres.
En la hornacina se distingue a San Roque, acompañado de un perro y un ángel. El santo va vestido de peregrino, con cuatro conchas sobre el pecho y sujeta un cayado que lleva colgada una calabaza. Cada una de las figuras está colocada sobre su peana.
Se cuenta que San Roque enfermó de peste y se curó de forma milagrosa pues no existía ningún tipo de cura en esa época (siglo XVI). Por ello, como ya se ha comentado en algún otro momento, era considerado un “santo anti peste” y “abogado contra la peste”. Lola Carbonell Beviá en su obra “Religión y repoblación en Menorca”, comenta que se rendía a San Roque un profundo culto por cicatrizar las úlceras.
A finales del siglo XIX (1870) se encendía un farolito de aceite en la hornacina, junto al santo. Más adelante se iluminó con luz eléctrica y actualmente no cuenta con iluminación.
Esta costumbre se mantenía todavía en agosto de 1884, tal y como comenta “El Semanario Católico”: “De ese tiempo inmemorial los vecinos de la calle de San Roque costean, además de la lámpara que arde todas las noches ante el nicho en que está colocada su venerada imagen, una misa que en Acción de Gracias por los beneficios recibidos, se celebra anualmente tal día como el presente; más hoy, en que la Iglesia celebra la festividad del poderoso abogado contra las epidemias, aquellos vecinos, en vez de la acostumbrada a misa rezada, la han hecho celebrar solemne, asistiendo todos ellos á la función que ha terminado con un solemne Te-Deum”.
En 1885 la fe en el santo permanecía inalterable y en la parroquia de Santa María, al anochecer, después de rezar el rosario, se hacía un novenario en su honor para librarse del azote del cólera mediante su intercesión. Hasta tal punto se confiaba en su poder que en febrero de 1886 se hizo una Misa Mayor y sermón, predicado por el Licenciado D. Francisco Cardona, Pbro., en acción de gracias “al glorioso San Roque” que, con su poderosa intercesión, libró de la última epidemia del cólera morbo a los habitantes de la calle San Roque.
La fiesta de San Roque, 16 de agosto, se celebraba adornando la fachada del puente, donde está colocada la imagen del santo, con banderas y follaje. (18)
En agosto de 1905, debido a unas obras de reparación de la fachada del arco, se cayó al suelo la imagen y se rompió la parte inferior, si bien se recompuso rápidamente.
En junio de 1932, época de la II República, fue cuando se produjeron los incidentes más importantes en relación a la imagen que nos ocupa:
El 17 de junio de 1932 se presentaron unos albañiles en el arco de la calle de San Roque y pidieron permiso a la inquilina de la casa para instalar un andamio y proceder a la supresión de la imagen. Las dueñas de la casa estaban ausentes y no habían dado su consentimiento.
La noticia corrió como un reguero de pólvora entre los vecinos de la calle, que asomados a puertas y ventanas y sin distinción de ideas políticas, parece ser que protestaron unánimemente. El suceso acabó por extenderse por toda la ciudad.
La imagen de San Roque iba a ser entregada al ecónomo de Santa María, pero éste acordó con la vecina que tenía su puerta debajo la bóveda, que se quedara en aquella casa depositada.
Las emociones hicieron que surgiese entre varios vecinos la idea de construir una hucha para que las personas de la calle que fuesen a invocar al Santo pudieran depositar limosnas para dedicarle mensualmente tantas misas como se pudieran. (19)
Se originaron todo tipo de opiniones ante la supresión de la imagen, algunas favorables y otras contrarias a tal hecho e incluso reclamaciones, como la de las hermanas María y Antonia Tutzó para restituir a San Roque en su hornacina.
En relación a la retirada de las imágenes de Santa Eulalia y Sant Roc, El Iris en mayo de 1933 comenta: "Guarden nuestros amigos de Mahón dichas veneradas imágenes, que ya llegará el día de su solemne reposición, y quién sabe si los enemigos de hoy serán mañana los que llevarán en andas, es decir, en triunfo las mismas imágenes, cuya desaparición somos los primeros en lamentar".
No obstante, el Ayuntamiento de Mahón se ratificaba en su decisión y mediante el acuerdo tomado en la Sesión ordinaria, celebrada el día 9 de junio de 1933 dice: “ … Sostener el acuerdo de el Ayuntamiento de 16 de septiembre del año anterior de retirar de la vía publica las imágenes colocadas en el Puente de San Roque y en la calle de Santa Eulalia, aprobar la actuación del señor Alcalde dando cumplimiento a dicho acuerdo; y desestimar la reclamación de las hermanas doña María y doña Antonia Tutzó para que fuese anulado el acuerdo de referencia y colocada la imagen de San Roque en su Hornacina, sin entrar el Ayuntamiento a discutir la pertenencia de dicha imágen”.
El diario conservador “El Bien Público” recogía, a finales de 1933, las siguientes opiniones al respecto: "Cartas a una amiga... Laizando, laizando, sin permiso de los dueños de los edificios en que estaban colocados, quitaron de sus hornacinas las imágenes de San Roque y Santa Eulalia con protesta general de los vecinos de ambas calles ..., ARAMIS", "... ¡CATOLICOS! acordaos de nuestros cementerios... secularizados. De nuestra Ermita de Gracia cerrada, de nuestros santos titulares: San Roque, Santa Eulalia y San Sebastián, arrancados de sus hornacinas...." y “...Las imagenes de nuestros Santa Eulalía y San Roque desprendidas de sus hornacinas en las fachadas de casas, cuyos propietarios protestaron de la obra e igualmente los vecinos todos de ambas calles...".
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| Calle de San Roque a principios del siglo XX. Postal de A. Rougault |
En este mismo sentido, el mes de junio del año 1935, en la publicación “Justicia Social” de la Federación Socialista Menorquina, aparece una pequeña reseña que por su tono no deja de ser curiosa, la titulan “Reposición de funcionarios” y dice así: “Al visitar el señor Lerroux el pueblo de la Rambla ordenó que fuese descubierto un Santo Cristo que figuraba en la fachada de la casa donde nació el distinguidisimo repúblico. Nosotros esperamos que procedente en justicia, dentro de poco será reintegrado a su hornacina nuestro clásico San Roque. En buena doctrina democrática los mismos derechos deben asistirle al Cristo de la Rambla que a San Roque de Mahón. Que no se pueda decir que el Crucificado de referencia ha tenido suerte por ser de Córdoba y porque lo protegió don Alejandro. Los santos de Mahón, aunque humildes tambien figuran en el santoral. Por lo tanto, señor Alcalde, en nombre de San Roque, !pedimos justicia!”.
En ese mismo año 1935, “El Bien Público” sigue insistiendo en que el Ayuntamiento retorne las imágenes de San Roque y Santa Eulalia a sus hornacinas en señal de respeto a los sentimientos ajenos y a la tradición.
Y continua: “... La propiedad existe y es respetada y mientras así sea, por muy laicos que sean los ediles, ni ellos ni nadie, podrán impedir que continúe en la fachada de una casa la imágen que hace siglos ostentaba, que el propietario conserva y que los convecinos veneran, respetan y aman. ARGOS”.
Por otra parte, “La Voz de Menorca” de junio de 1935 expresa una opinión diferente: “Nadie puede negar que vivimos en un Estado laico; que la República ha quitado los Cristos de las escuelas; que ha impuesto en ellas un plan de enseñanza completamente laico; que ha legalizado el divorcio en el matrimonio haciendo caso omiso de lo que diga o deje de decir la Iglesia católica; que ha secularizado los cementerios; en una palabra, que ha puesto un dique entre la Iglesia y el Estado… Nosotros creemos que hizo muy bien el Ayuntamiento en quitar las imágenes que ocupaban las hornacinas de las calles de San Roque y Santa Eulalia, sus devotos nunca se lo agradecerán bastante; gracias a ello, Argos ha podido decir que los convecinos las veneran, porque de no haberlas recogido con todo cuidado, entregándolas a sus respectivos dueños, hoy no podrían venerar más que su recuerdo. Solo gratitud al Ayuntamiento pueden tener sus devotos; y respecto a las imágenes, creemos sinceramente que tan satisfechas deben estar de verse respetadas, amadas y veneradas dentro de una casa, como colocadas en su hornacina; y si sus feligreses no están de ello muy seguros, ya deben saber la manera de conseguir de dichas imágenes una respuesta categórica.
Durante el tiempo que estuvieron de cuerpo presente en la via pública, no tendrán queja del trato recibido. Recordamos que el día de San Roque, hasta se disponía que el perrero lacero no actuara, con objeto de que los perros de la población también celebraran la fiesta del perro de San Roque.”
Y “Si algunos, de por acá, que se dicen católicos, se limitaran ha serlo solamente, sin hacer de la religión un arma política, probablemente aquellas imágenes estarían aun en sus hornacinas….PEPE ESE”. (20)
Al poco de finalizada la Guerra Civil, el Diario Nacional Sindicalista "Arriba España" de 17 de agosto de 1939 se comentaba:
"Fiestas populares en honor de San Roque. Ayer, fiesta de San Roque, y después de nueve años sin celebrarse, los vecinos de la calle de dicho nombre, organizaron unas fiestas populares en honor de su Santo Patrón, precedidas por la mañana de misa en la iglesia Parroquial de Santa María.
La calle estaba profusamente iluminada y adornada con banderas nacionales, y el puente en el que tiene su hornacina el Santo varón, con el escudo del Imperio y yugos y flechas, y la inscripción de España Una, Grande, Libre.
Por la tarde de seis y media a nueve, se celebraron diversos números populares, y desde dicha hora hasta las 11, una banda de música amenizó la fiesta. Al principio y al final se interpretaron los Himnos.
No hay que decir que tan popular fiesta resultó un éxito, viéndose tarde y noche la calle de San Roque concurridísima."
Mare de Déu
Mare de Déu. Maó
Carrer Sant Jordi esquina Cos de Gràcia, 13
Esta hornacina está situada casi enfrente de la iglesia de San José. Contiene la imagen de la Virgen, toda ella pintada de blanco, al igual que el resto de la hornacina. Está protegida por un cristal. También lleva una aureola lisa pintada de blanco.
Hornacinas desaparecidas
Se sabe de dos hornacinas con las imágenes de San Cristóbal y San Sebastián, hoy en día desaparecidas.
En cuanto a la primera existió una imagen de San Cristóbal en uno de los portales de la Muralla de Maó. Esta puerta, que tuvo muchas denominaciones, tales como Portal del Mirador, Portal de Baix, Portal del Monestir, Portalet del Monestir, también fue denominada de Sant Cristòfol. El portal estaba situado en el extremo de la calle de Sant Cristòfol (actual Isabel II) y en él estaba la hornacina con la imagen del mismo santo. Esta imagen que se conservó en el convento de las Concepcionistas hasta el año 1936, no se ha podido localizar. (21)
En cuanto a la hornacina con la imagen de San Sebastián tampoco ha sido posible localizarla. Probablemente estuvo en la calle del mismo nombre.
Conclusiones
Es manifiesta la gran diferencia entre las poblaciones de la isla en cuanto a la existencia de hornacinas, de tal modo que, como ya se ha comentado al principio de este trabajo, se han localizado 22 en Ciutadella, 3 en Ferreries, 3 en Es Migjorn Gran y 5 en Maó. Por ello cabe preguntarse por los motivos de esta disparidad.
Un primer motivo lo podemos hallar en el modo de vida y la economía de la isla. Como es sabido en el transcurso de la Edad Media se padecieron sequías, epidemias, hambrunas, plagas, etc. La población era objeto de amenazas externas de piratas e internas provocadas por los bandidos. Por otra parte estaba la gestión de los gobernadores de la época, mejor o peor, según el caso.
Todas estas circunstancias ocasionaron que la población se refugiara en la religión católica, desarrollando devociones que desde muy antiguo propugnaban creencias en curas milagrosas y fe en el poder sanador de determinados santos, rozando con todo ello la superstición.
Por otra parte en el siglo XVIII, se produjo el cambio de capitalidad de la isla desde Ciutadella a Maó. De este modo Ciutadella se configuró como capital únicamente eclesiástica y sede de la nobleza, mientras que Maó adquirió una función más política y administrativa.
Tampoco podemos obviar los conflictos políticos del siglo XIX con los enfrentamientos entre absolutistas y liberales y los de principios del XX durante la I y II República y la Guerra Civil, que repercutieron en el aspecto religioso. Una parte de la población, la más conservadora, se convirtió en partidaria de la religión, mientras que otra en detractora de la misma y de sus demostraciones.
Al ser Ciutadella una población más tradicional y más fuertemente influenciada por la Iglesia, todos estos considerandos tuvieron mayor repercusión, lo que explicaría una mayor abundancia de hornacinas en la actualidad.
Notas
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- Plan Especial de Protección del conjunto histórico artístico de Ciutadella de Menorca. 1999.
- ¡Oiga! : periódico bisemanal: Año I Número 10 de 19 de agosto de1935.
- El Iris : diario católico: Año XIX Número 5460 - 1931 Julio 11 de 1931
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- Bañon, Laura. "A Sant Pere sempre l’hem tingut present i ens guarda la porta". Menorca Info Maó. 1 de juliol de 2010.
- La Crónica de Menorca Nº 579 de 4 de enero de 1872. El Constitucional Nº 245 de 5 de enero de 1872. Nº 245
- El Iris. Número 1732. 16 de enero de 1919. El Iris : diario católico. Número 1733 de 18 de enero de 1919.
- El Iris : diario católico: Año XX Número 5748 de 2 de julio de 1932. El Bien Público. Número 1778 de 06 de julio de 1932
- El bien público: Año LX Número 18099 de 27 de julio de 1933. El constitucional: Año 2 Número 245 - 1872 enero 5[S.l. : s.n.], 05/01/1872
- Revisió del PGOU i adaptació al Pla Territorial Insular. Text refós normes urbanístiques.
- Taltavull Femenías, Enric. Catàleg de protecció arquitectònica i dels bens etnològics 2010 Alaior. Col·legi Oficial d’arquitectes Illes Balears.
- Semanario católico. Número 12 de 19 de noviembre de 1881
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- Juan Gutiérrez, Pbro, El portal de San Roque. Revista de Menorca: Vol. 36.1945.
- El bien público: Año LX Número 18042 - 1933 Mayo 17
- El liberal: órgano democrático de la isla de Menorca. Número 2436 de 16 de agosto de 1889.
- El bien público. Número 18043 de 18 de mayo de 1933 Mayo.
- La Voz de Menorca : diario republicano. Número 9592 de 13 de junio de 1935.
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Prensa
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El Iris: diario católico. Números: 1514 de 26/04/1918, 1593 de 3 de agosto de 1918, 1666 de 26 de octubre de 1918, 1684 de 1918 Noviembre 16/11/1918, 1732 de 16 de enero de 1919, [s.n.], 1733 de 18 de enero de 1919, 3687 de 13 de julio de 1925, 3981 de 10 de julio de 1926, 4273 de 7 de julio de 1927, 4443 de 31 de enero de 1928, 4568 de 5 de julio de 1928, 4569 de 6 de julio de 1928, 4579 de 18 de julio de 1928, 4581 de 20 de julio de 1928, 4863 de 6 de julio de 1929, 4864 de 8 de julio de 1929, 4869 de 13 de julio de 1929, 4875 de 20 de julio de 1929, 4571 de 9 de julio de 1928 , 5025 de 20 de enero de 1930, 5748 de 2 de julio de 1932 , 5460 de 11 de julio de 1931, 6018 de 19 de mayo de 1933, 6526 de 26 de enero de 1935.
El Mahonés: bisemanario católico popular y de noticias. Número 116 de 15 de diciembre de 1888.
El Menorquín: órgano republicano federal de la isla de Menorca. Números, 253 de 4 de junio de 1870, 609 de 28 de julio de 1871, 1240 de 6 de septiembre de 1873.
El Menorquín: Periódico literario, científico é industrial. Número 340 de 14 de febrero de 1868.
El Moscardón. Números: 24 de 26 de mayo de 1917, 29 de 4 de agosto de 1917 , 30 de 18 de agosto de 1917 .
El Noticiero popular. Número 74 de 19 de junio de 1909, 249 de 5 de julio de 1910, 252 de 12 de julio de 1910.
El vigía de Ciudadela. Números: 820 de 17 de septiembre de 1890, 821 de 20 de septiembre de 1890, 1038 de 26 de octubre de 1892, 1539 de 3 de abril de 1895.
Justicia social: Órgano de la Federación Socialista Menorquina y de la Federación Obrera de Menorca. Número 173 de 1 de junio de 1935.
La crónica de Menorca: periódico de intereses generales. Número 579 de 4 de enero de 1872.
La Voz de Menorca: diario republicano. Números: Número 8691 de 17 de junio de 1932., 8990 de 13 de junio de 1933 junio, 9592 de 13 de junio de 1935.
Llum Nova: quinzenari independent. Portaveu de la Secció Minerva de L' Unió de Mitjorn - Gran. Número 20 de 29 de marzo de 1913. Mitjorn-Gran.
Bañon, Laura. A Sant Pere sempre l’hem tingut present i ens guarda la porta.
Bañon, Laura.. El carrer Sant Cristofol recupera la seva festa: Els vesins organitzen el proper dia 9 una bereneta popular seguint la tradició d’una festivitat arrelada a Ciutadella.
Saborit, Fela. Ciutadella Vella renace para defender el casco antiguo.
Mesa Revuelta: Semanario Literario Festivo. Núm. 2 de 18 de enero de 1903.
¡Oiga!: periódico bisemanal. Año I Número 19/08/1935.
Revista de Menorca: Ciencias, artes y letras. Septiembre, 1945. Ateneo Científico, Literario y Artístico de Mahón.
Semanario católico. Números 12 de 19 de noviembre de 1881.
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